Por Tadeo Cadena
En este periodo de pandemia, ha surgido en muchas familias la duda sobre qué tan conveniente es enviar a sus hijos a una institución escolarizada, principalmente por el temor a que lleguen a enfermarse y arriesgar no solo la integridad de la familia sino también la estabilidad económica, por los gastos que deben solventarse.
Así mismo, tienen la incertidumbre de que en este ciclo escolar que inicia, la metodología de trabajo recaiga nuevamente en el envío de proyectos, clases a deshoras, estrés en los jóvenes y por qué no decirlo, también en los padres de familia al tener que responsabilizarse del aprendizaje de sus hijos al darles clases sin tener la preparación adecuada o el tiempo suficiente.
Por otro lado, algunos papás han tomado en cuenta otro aspecto: el económico, considerando que las restricciones laborales afectan al 81% de la fuerza laboral mundial, les es preocupante hacer gastos en inscripción, colegiaturas, talleres, uniformes, útiles escolares, materiales, entre otros, con la intranquilidad de que sus hijos puedan asistir a clases o no y que el gasto realizado sea en vano.
Estos y otros motivos han llevado a varios padres a considerar la educación abierta para que sus hijos continúen, no obstante, al ser un sistema ajeno al que ellos mismos llevaron, les surgen diversas inquietudes, por ello, a continuación expongo algunas ventajas que tienen los jóvenes que estudian su preparatoria con nosotros en un sistema abierto:
El certificado que se expide es de la Secretaria de Educación y es válido para cualquier carrera en cualquier universidad dentro y fuera del país.
El plan consta de sólo tres módulos.
Puede terminar en sólo seis meses o más tiempo según el ritmo de estudio de cada estudiante.
Las inscripciones están abiertas todo el año.
Puede tomar las asesorías en línea o presenciales.
La atención y seguimiento es totalmente personalizado.
El avance depende del ritmo de cada estudiante.
Se establece un plan de trabajo según las necesidades y proyecto de vida de cada estudiante.
Los pagos son muy accesibles.
No hay cuotas de laboratorio ni uniformes.
Los libros y guías de estudio son GRATUITOS.
Se apoya a atletas de alto rendimiento o estudiantes que trabajan.
El modelo de trabajo está enfocado a que cada estudiante desarrolle estrategias de aprendizaje autónomo (esto ha permitido que más del 90% de nuestros egresados estudien en alguna universidad y sean reconocidos por su alto nivel académico).
Las guías de estudio se basan en las posibles preguntas que contienen los exámenes, por lo que es MUY difícil que los estudiantes reprueben.
Los exámenes son en línea y pueden resolverlos desde cualquier dispositivo móvil, como su celular, tableta electrónica o computadora.
Los exámenes los pueden aplicar directamente en nuestras instalaciones en caso de no contar con servicio de Internet o porque así lo desean.
La calificación del estudiante es INMEDIATA, por lo que no hay que perder tiempo para saber el resultado.
Como Docente y Asesor Académico, estas son algunas ventajas que he identificado que tienen nuestros estudiantes, así mismo, cabe mencionar que en ocasiones algunos estudiantes vienen de un proceso de acoso escolar que les ha mermado su seguridad personal y autoestima, por lo que, al estar y sentirse en un espacio a salvo y positivo, restablecen y generan una resiliencia que les permite salir adelante.
Si bien, no basta saber las ventajas es necesario derrumbar algunos mitos:
1. Mito: La prepa abierta es solo para obreros o gente que no aspira a más.
a. Realidad: El sistema abierto permite tener cientos de opciones académicas, culturales, deportivas y laborales, que en un sistema escolarizado no es posible, debido al tiempo que tiene que permanecer un joven en la escuela.
2. Mito: En una escuela abierta no aprendes lo mismo y estás en desventaja.
a. Realidad: Los contenidos temáticos estudiados son los mismos, ya que son establecidos por la Secretaría de Educación Pública.
3. Mito: La prepa abierta es para quienes no tienen la capacidad de estudiar.
a. Realidad: La mayoría de los jóvenes que ingresan a la prepa son sobredotados (conocidos como niños genio), lamentablemente en un sistema escolarizado se les limita y solo se les instruye a seguir lo que un docente considera que deben aprender, generando que se aburran y posteriormente sean etiquetados como chicos problemáticos, inclusive a algunos se les diagnostica con un trastorno como el de Hiperactividad con Déficit de Atención.
4. Mito: Las Universidades no aceptan esos certificados, o dan preferencia por los de ciertas preparatorias.
a. Realidad: Los certificados son expedidos por la Secretaría de Educación y al ser oficiales no tiene ningún problema. Además, el examen de admisión es en base a una prueba que evalúa los conocimientos, habilidades y valores que debe tener un joven para poder continuar sus estudios. Si fuera real que las universidades se fijan en si es en línea o no, todos los estudiantes de cierta preparatoria siempre serían aceptados y la verdad es que eso no sucede; por otro lado, las propias universidades ofrecen modalidades de estudio de carreras No Escolarizadas o en Línea, por lo tanto, caerían en una contradicción al no aceptar certificados de preparatoria con dicha modalidad.
5. Mito: La mayoría de los estudiantes de prepa abierta son adultos.
a. Realidad: En nuestro Modelo Educativo, se pueden inscribir estudiantes recién egresados de secundaria, es decir a partir de los 15 años.M
En mi experiencia, puedo decirte que no es solamente que la preparatoria tenga Reconocimiento de Validez Oficial lo que se tiene que considerar, también es imperante buscar una en la que te sientas cómodo, donde cuiden tu dignidad, donde tengas el apoyo y el seguimiento que en verdad te permitan terminar tus estudios.
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